Nuestro paso por Irán
Una vez llegamos a Teherán estuvimos una semana atrapados mientras nos arreglaban la moto y buscábamos la forma de llevarla de Irán a la India. Así que la mayor parte de esa semana la pasamos entre visitas al taller y al aeropuerto. Dos puntos que tratamos en posts aparte porque son más peliagudos y tienen mucha información, sobre todo el de embarcar la moto en un avión. Por suerte Daniel y Annette nos ofrecieron su jardín para acampar mientras estuvimos allí.
Pero hicimos alguna que otra escapada para conocer la ciudad y la gente de allí. Así conocimos a Zahra y Mohammed, una pareja con la que llevábamos hablando desde hacia tiempo por Couchsurfing. Nos invitaron a cenar en su casa y nos contaron un poco más sobre el país. Nos sorprendió la mentalidad tan abierta que tiene la gente para lo represivo que es el sistema.
Una vez tuvimos la moto arreglada y más o menos solucionada la forma de embarcar la moto en el avión, nos dimos el lujo de visitar algo más de Irán. Hicimos una visita rápida a Kashan, Yadz e Isfahán porque en cuatro días teníamos que volver para preparar todo el vuelo.
En Kashan visitamos el lago de sal Namak y las dunas. También vimos un palacio pero no nos acordamos del nombre :-/
En Yadz vimos la mezquita. Si viajas con un presupuesto bajo y tienes tienda o saco de dormir, te recomendamos que propongas en las guest house al lado de la mezquita dormir en el tejado. Es muy económico y las vistas son preciosas.
En Isfahán visitamos la plaza del Iman y su bazar, por el que nos perdimos y encontramos maravillas como artesanos trabajando el metal a base de mazo y puntal.
Lo más curioso ha sido que en todo el viaje donde más españoles nos hemos encontrado ha sido en estas ciudades. ¿Quién dijo que Irán era un sitio inhóspito y peligroso?